Frente al avance de las plataformas electrónicas y de las empresas de hardware, una tecnología como el POD se mantiene todavía en un segundo plano. Sin embargo, algunas empresas del sector han comenzado a apostar por esta nueva modalidad. En octubre de 2010, se celebró en Moscú la tercera exposición anual “On Demand Russia”, un evento que permitió a decenas de compañías –sobre todo fabricantes de equipos y empresas de software– exhibir sus productos y servicios. Leonid Shakhmundes, director del American Technology Print Center –una de las entidades organizadoras– expresó:
Los proveedores del mundo de la impresión necesitan una educación continua y foros como éste para comprender mejor cuales son las opciones disponibles y cómo pueden utilizarlas con éxito en sus negocios.[1]
La red actual de POD ya ha permitido el surgimiento de portales de auto-edición, tales como Samizdal, Book4Baby y Book4Family, todos ellos pertenecientes a Webov and Knigin, un sello digital independiente que apunta al nicho de publicaciones personalizadas. Bajo el lema “Tecnología moderna al servicio de la literatura”, Samizdal ofrece a los autores la posibilidad de publicar y distribuir sus libros a través de la web, en formato impreso bajo demanda; también realiza trabajos de diseño, corrección y edición de imágenes. Book4Baby, por su parte, concentra títulos educativos y de desarrollo infantil. Finalmente, Book4Family se orienta al mercado de libros de regalo y obras conmemorativas.
Además del modelo B2C que caracteriza a los sitios de auto-edición, también encontramos negocios B2B, es decir, portales que ofrecen servicios POD a otras empresas, concretamente a editoriales. Un ejemplo relevante es Kniga Po Trebovaniyu (Libro Bajo Demanda), que trabaja para más de 200 sellos rusos. Los libros de Kniga Po Trebovaniyu se imprimen a pedido y pueden conseguirse en tiendas locales como Ozon o Biblion pero también en librerías internacionales como Amazon, Barnes&Noble, Blackwell y Adlibris. Kniga Po Trebovaniyu está a punto de instalar decenas de terminales de POD en librerías físicas de diferentes ciudades de Rusia, iniciativa que permitirá a los lectores de localidades alejadas acceder a un catálogo de alrededor de 300.000 obras en unos 50 idiomas.[2] Yevgeniy Khata, director de la compañía, reconoce que actualmente la presencia de la impresión digital en el sector del libro ruso es secundaria, pero advierte que la responsabilidad de este retraso tal vez deba endosarse más a los editores que a las empresas de tecnología. [3]
- Cf. ON DEMAND Russia 2010 A Success for Attendees & Exhibitors.↵
- Cf. , Region-perm.ru, 29 de septiembre de 2010.↵
- Según sus estimaciones, el POD no supera el 0,2% del total de mercado. Cf. Kozlov, Vladimir: “Buddy, can you spare a book?”, The Moscow News, 25 de noviembre de 2010.↵